sábado, 9 de enero de 2010

Alguna vez iba a pasar

Esta vez la historia se convirtió en una unipersonal centrado en Edu. Pero atención!!! que no se malentienda. Esto no fue debido a su carisma extrovertido o si adicción fotográfica. No. Para nada. esta vez el que se cayo de la historia fui yo. Por lo visto Bolivia no tiene un buen recuerdo de mi ultima visita y me recibió con unas nanas que no me dejan salir de la cama.


El Dr. Gastón Delgadillo Lora (boliviano doctorado en Bruselas y con asilo espiritual en Sucre) diagnosticó: "amigdalitis infecciosa", pero después, seguramente motivado por mi cara de asombro y temor, aclaró: "infección pusosa de las amigdalas con afección a los pulmones" (pusosa le suena tan horrible como me sonó a mi??!!!). Veinte días máximo de vida sin medicación, pero con medicación puede que sobreviva. Procedimiento: "inyección de penisilina mas antialérgico, jarabe para la tos y comprimidos de antipirina". Por un momento pensé en salir corriendo de las garras de ese Dr. House boliviano pero la fiebre me ganó de mano y no me dejo pensar claramente. Además Dr. House de una u otra forma te convence o te engaña no?.

Así fue nomás, pinchazo dolorosísimo en la "nalga", jarabe vomitivo tres veces al día y Edu que lleva mi fantasma a cuestas. Sabrán entender la falta de fotos, Edu no puede con todo.

Pero el camino no tiene fin y no hay fiebre que tire el freno de mano. Mochila a la espalda. Un bus nos lleva de Villazon a Potosí. Pero nada es fácil en el sur de Bolivia... nada... y el bus decide quedarse chapoteando en un río crecido. Palas, ramas, sogas y varias almas tirando y empujando lograron convencerlo de seguir camino. Se ven cosas raras en estos pagos. Otro bus, peresoso de nacimiento, decidió tirarse a dormir una siesta; vuelco hacia la derecha; gracias a Dios la banquina estaba lejos; algunos golpes y heridos leves, nada grave dijo el parte médico. Suerte que nuestro bus no estaba tan cansado y con algunas quejas y caprichos nos dejo en Potosí.

Salida en bus desde Villazon a Potosi

Que decir de Potosí? es la segunda vez que visito la ciudad y sigo sin entender como una ciudad que supo ser de las mas ricas de America Latina, levantada a fuerza de plata, sudor nativo y opresión católica, permanezca en igual estado que en la época de la colonia. Potosí es una viaje en el tiempo hacia el pasado. Es una ciudad de contrastes. Por un lado repleta de iglesias que vomitan oro y plata en sus altares y por el otro una gran masa de gente que vive como puede, algunos mendigando, otros en sus pequeños comercios callejeros aguantando su frágil economía familiar y los mas infelizmente ocupados, trabajando en la mina del Cerro Rico.


En las Calles Potosinas. No se nota, pero estoy atado a edu y al poste.

Parrafo aparte para las minas del Cerro Rico. Acá no hay medias tintas. No hay metafora que valga. Como hacer para hablar o visitar las minas y no sentirse un pelotudo? Lo que para nosotros es un circuito turístico dentro de un folleto de turismo, para los pobladores es su principal medio de subsistencia...y extinción.


En busca de nuevas salidas laborales, si falla la mineria simpre esta la politica.

Salimos por la mañana, nos dan botas, un mameluco impermeable, casco protector; preparamos nuestras camaras, estamos divinos con el conjuntito. Subimos al bus y al rato entramos a la mina. Descendemos unos cuantos metros por tuneles y cavernas y de repente quedamos frente a un minero. El tipo esta ahí, arrodillado, tranquilo, picando piedra a piedra, a golpe firme y lento. Preparo la camara. Pero antes pregunto; los turistas siempre preguntamos, solo que a veces la respuesta es dura. El minero no tiene nombre, acá abajo eso no hace diferencia; tiene cuarenta años pero la mirada como de setenta; desde los doce entra a la mina todos los días, diez a doce horas diarias, a veces mas; por su sangre corren metales inhalados del aire; tiene como compañeros la coca y el alcohol. "Pero ahora están mejor" dice el guía, "antes no llegaban a los treinta años". Bajo la camara, algo crece en mi interior. Escuchamos murmullos juguetones corriendo por los pasillos oscuros que se mueven, que se acercan. En unos segundos aparecen unas lucecitas en la oscuridad; un grupo de niños de entre doce y quince años (no se, es tan difícil sacarles la edad) pasan entre nosotros, nos piden coca o cigarrillos; sin pensarlo le doy; le dejan algo al minero y siguen su camino, como jugando en un arenero de oscuridad y húmedad. Apago la camara. Me trago las lagrimas. Los hombres no lloran, quienes??? Algo crece en mi interior. Creo que es verguenza, dolor, tristeza. Me dan ganas de vomitar, debe ser la falta de aire, no, es mi humanidad que estaba escondida, perdida? una aviso de dinamita nos obliga a movernos. hasta acá llegamos, hay que salir. Ascendemos y salimos a la superficie. Aire. Por fin aire. El aire esta mas espeso, pero no es el aire el que cambió sino yo. Tengo un peso en el corazón que antes no estaba. "Así es Bolivia" me dijeron, pero no me alcanza. Pasan las horas, me encuentro en una mesa con amigos, pizza y cerveza, hasta tengo ganas de reír. si. me río. Reimos y charlamos. Y con los días todo pasa pero ese peso, ese pequeñito peso me queda en el corazón, molestando, enclavado en la carne, haciéndose carne. El recuerdo de la mina me trae lagrimas otra vez. Los hombre si lloran. Sobre la fiebre. "Bolivia es así" repiten por ahí, como si de alguna forma sirviera tal justificación. Mi cabeza no lo puede aceptar. Ese peso sigue molestando. Pero me gana la fiebre y me dejo vencer por el abrazo de una cama; un día duro merece un descanso.




Sin comentarios. Saquen sus propias conclusiones o vengan a Bolivia.

Así es Potosí, eso si lo creo. Pero así y todo, la ciudad de plata no deja de deslumbrar; sus callejuelas con fachadas barrocas, sus herrerías, sus balcones españoles, sus museos y sus iglesias. Eso si, la fe no es gratis, 15bolivianos para visitar la Catedral. Demasiado para nuestro bolsillo mochilero, Dios no se va a enojar, la próxima ves será.

Sabiduria callejera y popular. Las venas siguen abiertas

La fiebre sigue subiendo y las ganas de seguir viaje también. Partimos hacia Sucre. Agrupamos mochilas y amigos. Esta vez el destino nos regala dos amigas cordobesas. Que lindo cuando el destino nos mima con buena companía. Después de discutir con varios taxistas, las cordobesas se pusieron firmes y mas de 25bolivianos no largan, que si, que no y uno llamado Julián acepta. Guerra de taxistas pero Julián sobrevive. A Sucre partimos.

Ya en el camino algo va cambiando. Bajando metros sobre el nivel del mar la naturaleza se pone mas gentil. Quebradas y valles cruzados por ríos y acequias. plantaciones por doquier y un verde húmedo que ya estaba extrañando demasiado. Una rareza mas de Bolivia, Sucre es la capital administrativa del país, y se nota. Es una ciudad mas ordenada y mejor mantenida que Potosí, o quizás quedo un poco alejada de la codicia y la depravación potosina, no se. Pero Sucre es distinta. Su arquitectura barroca esta perfectamente conservada, edificios culturales, plazas arboladas, calles empedradas y arcos convierten a Sucre en una ciudad de gran atractivo.

Calles de Sucre

Pero la fiebre ya no se aguanta. Visita a Dr. House y reposo en un cuarto de hostel. Gran cosa los Hostels. Es como si entre sus paredes todos somos iguales. nos olvidamos de nuestros prejuicios y verguenzas. Intentamos hablar ingles, frances y holandes, hasta me dijeron que Edu se animo al japones!!! Y así, de vez en cuando, por obra de vaya uno a saber que astro galáctico, se van armando pequeñas familias transitorias que se reunen alrededor de una mesa a compartir alegria y felicidad. Vayan pasando que se arma el baile y al fondo siempre, pero siempre, hay lugar.


El que descubre las cordobesas tiene premio!!! las holandesas no che!!! es muy facil. ahhhh...coca cola, ponete las pilas y tira un billete por la publicidad

Pero hay algo que nunca cambia en nuestro viaje. hoy te digo hola, mañana hasta siempre y ya te estoy extrañando. La fiebre sigue alta, voy de la cama al baño, si, al baño, porque así es Bolivia y no hay dos sin tres.


buseta a la terminal de Sucre. Lo que esta en el asiento delante de edu es mi mochila, debajo esta mi fantasma acurrucado en el piso.

El camino continua. Edu ata mi fantasma, casi espectro, a su mochila y me arrastra a la terminal. Bus a Cochabamba. Como duele la inyección. Claro, si Dr. House me dijo: "le va a doler pero los gauchos son gente dura". Pero yo de gaucho llevo solo el mate y las alpargatas. El sueño vence a la fiebre. Edu me dijo algo pero no le entiendo, creo que fue en chino o japones, quizás ya aprendió kechua con una chola. Duermo. Por fin duermo. Hago el esfuerzo pero no puedo. Me caigo. Me caigo de la historia otra vez.

6 comentarios:

  1. Como decía el Abuelo Justo, "sarna con gusto no pica", por lo visto llevas bien la fiebre porque tus narraciones son mumagníficas... o estas delirando por la fiebre?. Che Edu no perdonó ni a las Cholas?. Suerte chicos y buenos vientos los acompañe (viejo lobo de mar je, je) Marce y Oski

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  2. che ya te enfermaste walter???? pero que tiernito!!!! ja ja!!!! Cuidate mucho mira que no queremos una estatua en bolivia que diga " aqui descanza un Argentino Tierno!!!!!!!!! Un abrazo grande de corazon y bendiciones para ambos. Familia PRADO MORENO

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  3. Wal no me digas que extrañas los cuidados que tenias en casa de mamá para recuperarte, vamos tomate un té de cebolla como hacia la abuela Elvira, bancate las inyecciones del Dr House, dormi un día entero y a disfrutar. El camino es así suave por un lado y aspero por otro; pero siempre MARAVILLOSO.
    Sigan disfrutando de la diversidad femenina del mundo que les entrega el camino. Juan dice que traten de supurar un poco de testosterona a ver si se enganchan a alguna manga de solterones!!!. Besos a vos y a Edu. Te quiero mucho y recuperate pronto. Zaida

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  4. Los quiero ver a ustedes con fiebre y una mochila de 20kg en la espalda por Bolivia ehh!!! a ver quien es mas tiernito jajaja. besos a todos y muchas gracias

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  5. Che Zaida, solo para respetar la buena fe de la diversidad femenina que comentás, cabe aclarar que solo fue un gran compania y una enorme amistad como pocas en el viaje, de las mejores y que va a ser mas que dificil de igualar. unas genias totales!!!

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  6. como estan chicos? yo ando medio mal porque el dia 19 de enero se estrello el helicoptero de prefectura y murieron mis dos compañeso la verdad que estamos todos mal en mi trabajo por suerte gracias a Dios estaba de licencia porque sino era yo el que se caia. Saludos a los do.
    Daniel

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Porque viajamos?

Viajamos por viajar. Viajamos para saber, para conocer, para aprender. Viajamos para crecer.
Viajamos porque buscamos sin saber claramente que, pero convencidos de la necesidad interior e inagotable de buscar y buscar.
Viajamos porque a veces escapamos con el corazón entristecido, queriendo ocultar ese amor en algún lugar del olvido.
Viajamos porque nos preguntamos que nos esconde el horizonte, allá a lo lejos donde el sol se apaga y la luna con sus estrellas conquistan el oscuro cielo de la noche.
Viajamos porque sentimos el llamado ancestral del camino, aquel que temprano iniciamos con nuestro primer paso de niños, esperando completarlo con un ultimo paso de ancianos envejecidos por los años, con las manos y el cuerpo agrietados por el viento del camino, pero con la certeza de haber vivido con la voluntad de un hombre libre y plenamente vivo.